Tuesday, July 8

Perú: optimismo económico en medio de desafíos externos

En los últimos días, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) de Perú reafirmó su proyección de un crecimiento económico del 4% para 2025, respaldado por indicadores positivos como el aumento en la recaudación tributaria y niveles históricos de confianza empresarial. Sin embargo, este optimismo se enfrenta a tensiones externas, como la imposición de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos, que podrían impactar sectores clave. Este artículo analiza las perspectivas económicas del país y contrasta las opiniones de diferentes fuentes.

Proyecciones de crecimiento y confianza empresarial

El MEF ha destacado que la economía peruana podría crecer un 4% este año, impulsada por la ejecución de nuevos proyectos de inversión pública y privada, un “shock desregulatorio” para reducir trabas burocráticas y la consolidación de la confianza empresarial. Según datos del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), los indicadores de expectativas empresariales han mantenido niveles optimistas durante diez meses consecutivos. En marzo, las expectativas sobre inversión y contratación alcanzaron máximos históricos desde 2013 y 2014, respectivamente.

Este crecimiento proyectado posicionaría a Perú como uno de los líderes económicos en América Latina para 2025, superando la tasa global estimada en 3.3%. Además, el incremento del 21.5% en los ingresos tributarios del Gobierno Central en marzo refuerza esta perspectiva positiva.

Impacto externo: aranceles estadounidenses

A pesar del optimismo interno, Perú enfrenta desafíos externos significativos. Estados Unidos ha impuesto un arancel del 10% a las importaciones peruanas, lo que podría afectar sectores clave como minería y agroexportaciones. Aunque el MEF aún no ha evaluado completamente el impacto, esta medida podría reducir los ingresos por exportaciones y generar tensiones cambiarias.

En este contexto, el gobierno peruano busca mitigar los efectos mediante estrategias para diversificar mercados hacia Asia y Europa. Sin embargo, analistas advierten que estas tensiones comerciales podrían complicar las metas económicas del país si no se toman medidas correctivas oportunas.

Contraste entre fuentes: ¿crecimiento sostenible o proyecciones optimistas?

Mientras el MEF mantiene una postura optimista sobre el crecimiento económico, algunas consultoras y economistas proyectan tasas más conservadoras. Por ejemplo, BBVA Research estima un crecimiento del 3.1% para 2025, destacando que los avances dependerán de factores externos como el desempeño de China y Estados Unidos. Asimismo, analistas independientes han señalado que los desafíos estructurales —como la informalidad laboral y la dependencia de materias primas— podrían limitar el potencial económico a mediano plazo.

Por otro lado, las expectativas inflacionarias son positivas. Se espera que la inflación se mantenga dentro del rango meta del BCRP (entre 2% y 2.5%), lo que podría favorecer el poder adquisitivo y la estabilidad macroeconómica.

Conclusión

La economía peruana muestra señales alentadoras con proyecciones optimistas respaldadas por indicadores internos sólidos como la confianza empresarial y el aumento en la recaudación tributaria. Sin embargo, los desafíos externos —especialmente las tensiones comerciales con Estados Unidos— representan riesgos que podrían alterar estas perspectivas.

El éxito del gobierno en alcanzar sus metas dependerá no solo de su capacidad para implementar reformas estructurales que fortalezcan la competitividad interna, sino también de su habilidad para manejar las presiones externas en un entorno global incierto. La combinación entre estabilidad interna y adaptación a las dinámicas internacionales será clave para garantizar un crecimiento sostenible en los próximos años.